Después de la locura de este Black Friday, los pequeños empresarios debemos tener muy claro cómo competir en desigualdad de condiciones.
Debemos ofrecer productos que nos distingan de las grandes empresas.
Para unirnos a ese gran evento mundial, ofrecimos a nuestros clientes los portes gratuitos durante todo el pasado fin de semana.
Y volvemos a la cuestión inicial, ¿cómo distinguirnos?
Desde que empecé a diseñar y hacer bisutería, mi idea fue ofrecer diseños en plata de ley aprovechando la destreza de los orfebres mexicanos y hacer el montaje en Madrid totalmente a mano y con materiales de calidad. De ahí uno de nuestros hashtags favoritos en las redes sociales, #slowlymade.
Pero además de la calidad, también nos interesan el respeto al medio ambiente y las condiciones de trabajo. En su mayoría nuestra cintas y cordones cuentan con el certifiado internacional Confidence in Textiles.
Y aunque hoy en día hay mezclas magníficas, ¿quién no prefiere un buen jersey de cachemira, un cordón de seda 100% o un buen rayón japonés?
Y creo saber de dónde viene mi obsesión por los materiales de calidad. Mi padre dirigió durante muchos años la que en su momento fue la fábrica de cremalleras más grande de México, Cierres Ideal.
Hasta hace no mucho, siempre que iba a alguna tienda con él y vendían ropa, iba lanzado a buscar cremalleras de cada prenda. Me decía que a nivel mundial había muy pocos fabricantes de buenos zippers.
Y más aún, que una prenda o accesorio no podía ser de calidad si no tenía una cremallera a la altura. Por eso hasta la fecha lo primero que miro en un prenda o accesorio es la composición.
Y lo segundo... la marca de la cremallera.
Como conclusión del tema de cómo competir, en PecoraMadrid lo hacemos de tres formas: con materiales e insumos que aseguren la calidad, con una hechura que mime el detalle y un precio menor que el de la competencia.
Y a todo esto, ¡gracias por todas vuestras compras de estos días!
Hasta pronto.
Ruth Fajardo